Con el presidente de la Cámara de Representantes, Daniel Pérez, anunciando ya un nuevo comité de redistribución, el liderazgo republicano está impulsando un claro caso de manipulación de distritos, así de simple.
La constitución de Florida es clara: los mapas no pueden dibujarse con la intención de favorecer o perjudicar a un partido político, ni pueden reducir la representación de las minorías. Los votantes aprobaron de forma abrumadora estas protecciones de “Fair Districts” porque creen que ellos deben elegir a sus representantes, y no que sus representantes los elijan a ellos.
Este intento de obtener más poder viola tanto la ley como la voluntad del pueblo. No se trata solo de mapas, sino del valor del voto de cada floridano. Con un mapa manipulado, muchos votantes quedarán en distritos donde el resultado ya está decidido, dejándolos sin una verdadera voz sobre quién los representa.
Como Fiscal General, haré cumplir la constitución, defenderé la Enmienda de Distritos Justos y protegeré el derecho de todas las comunidades a una representación justa”.
